lunes, octubre 24, 2005

La nueva careta


Bien, elecciones 2005, Macri "gana" en la capital. Como se trata de elecciones parlamentarias se trata sólo de una cuestión de grado, 6 diputados frente a 4 de la lista que le sigue, 6 de un total de 13 en juego... Sin embargo el efecto es espectacular, y parece a nadie caberle la duda de que a partir de ahora se convierte en la figura más carismática de la derecha. Por lo tanto, futuro candidato a la presidencia.
El escenario previo, cabe rememorar, era el de una derecha autocrítica que reconocía que sus figuras no seducían a la mayoría, y en ésto tanto Macri como Murphy valían igual. De hecho Lopez Murphy lideraba por tener un partido organizado con una historia ligeramente más prolongada.
Notablemente, los números de Macri no mejoraron con respecto a las elecciones pasadas, pero en este caso, la oposición dividida le permite hacerse del primer puesto.
En contraposición, Lopez Murphy obtiene un pobre 4º lugar en la provincia, aunque esto también era de esperar.
Llama la atención entonces el triunfalismo de la derecha y la reacción acorde de muchos (me incluyo).
Sin embargo no es sólo la cuestión numérica. Ha habido efectivamente una suerte de condensación de la figura Política en Macri. Un estilo propio fuertemente antipolítico, caracterizado por un lenguaje despreocupado, superficial y simplificador. La calma y la autoconfianza reemplazan cualquier otra característica que puediese verse como necesaria en un hombre político: experiencia, perspectiva, cultura, ideales o carisma.
La humildad convoca extraña, perversamente, la omnipotencia. Es la sobriedad de una figura divina que no puede vanagloriarse de su propio poder porque sería incoherente. Es la respuesta dialéctica al estilo de Menem que ya fue experimentado y superado por el electorado.
Esta nueva versión del terrorismo del poder, no necesita seducir o advertir. Le basta con actualizar su formidable poderío en los medios en un momento clave, y, merced a sus recursos económicos puede transformar cualquier herramienta en una carta definitiva para conquistar el gobierno.
La advertencia ha sido hecha, aunque Macri no llegase a ser su figura dominante, podemos estar ante el nacimiento de "la nueva vía" de crecimiento para la derecha en Argentina, el nuevo espejismo capaz de captar a la mayoría para que confíe su representación a los agentes más puros del mercado. El antídoto como siempre es sencillo y raro: mejores propuestas del otro lado.

1 comentario:

punchou dijo...

Mas, mas!!!!! Postea mas!!!!